Nano air
En este nuevo artículo no voy a hablarles de filosofía, psicología, física, ni de cosa trascendente alguna, no.
En el presente artículo, quiero llamar su atención sobre el último ingenio de ARPA.
Digo último y quizás esté diciendo mal. Puesto que aunque es el último que ha mostrado, quizás no sea el último desarrollado.
Este artefácto, que simula la fisionomia del colibrí – incluído su característico aleteo – no es ino el más diminuto espía que la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados del ejército USA (ARPA, ya sabe usted, los mismos que inventaron Internet).
El “Nano air” es un vehículo aéreo que se empleará para vigilancia urbana y misiones de reconocimiento. Y aunque no come alpiste, debe de ser alimentado por baterías.
Simulando la técnica de los colibríes y su ultraveloz aleteo este artilúgio es capaz de detenerse en medio del vuelo, como el pájaro al que imita, para obtener imágenes con nitidez. Ya que está provisto de una mini cámara.
Tiene una autonomía de 8 minutos, dentro de la cual, puede alcanzar una velocidad punta de hasta 17 km/h de sin depender de una fuente externa de energía. Tal autonomía puede parecer insuficiénte pero hay que recordar que cualquiera que mire hacia este constructo desde la suficiente distancia no distinguirá más que un pajarillo. Si esto no es suficiente, señalarle – a modo de pregunta – otra de sus propiedades: ¿Cuántas fotografía puede realizar una cámara de “repetición” en 8 minutos?.
Además de lo ya mencionado, este armatoste puede volar tanto en interiores como en exteriores realizando con facilidad la transición entre ambos.
Y hasta aquí la noticia.
Ya veo a más de uno y más de dos, como en tiempos medievales, interceptando colibríes como se interceptaban las palomás mensajeras.
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