Medios argentinos reportan que el pasado día jueves 10 de febrero un avión militar estadounidense aterrizó en el aeropuerto de Ezeiza con un cargamento de armas y drogas, por lo cual fue incautado en Buenos Aires. La Aduana procedió a realizar un chequeo de la carga y allí se descubrió que buena parte de ella no figuraba en el listado "de buena fe" provisto por la Embajada.
El enorme C17, un carguero Boeing Globmaster III, más grande que los conocidos Hercules traía los que se calcula son dos millones de dólares en armas. No se ha revelado que drogas llevaba y sobre todo ¿por que un avión militar llevaba narcóticos? Aunque se especula que el arsenal de poderosas armas largas y tal vez las drogas eran parte de un curso sobre manejo de crisis y toma de rehenes ofrecido por el gobierno de Estados Unidos al Grupo Especial de Operaciones Especiales de la Policía Federal (GEOF), que debía tener lugar durante todo febrero y marzo.
La vocera de la secretaría de Estado de Estados Unidos dijo que el contenido del avión es el que se suele usar para uno de estos programas y que había sido aprobado por el gobierno argentino: "Estamos buscando la devolución inmediata de todos los artículos retenidos por el gobierno de Argentina", señala el comunicado.
Se podría tratar de una falta de coordinación dentro del estado Argentino o quizás una operación encubierta que sólo es conocida por ciertas dependencias y que fue descubierta por personas que no tenían conocimientos clasificados.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó que el incidente del avión militar norteamericano en Argentina demuestra que Estados Unidos "negocia con la droga en el mundo" y agregó que Washington no tiene moral para hablar de la lucha contra el narcotráfico.
El incidente recuerda al caso de Barry Seal, el ex agente de la CIA quien llevaba cocaína en aviones del gobierno de Colombia a Estados Unidos.